VSF (BARCELONA).- El 82% de las rosas que se venden el Día de Sant Jordi son de importación. Provienen principalmente de Colombia, Ecuador y Kenia. La floricultura para la exportación en estos países del Sur genera severos impactos sociales y ambientales que pasan por condiciones laborables de "maquila": precarización, bajos sueldos, horarios inhumanos, problemas de género (la inmensa mayoría de las personas que trabajan en los invernaderos son mujeres), contaminación por plaguicidas, prohibición de sindicatos, etc.
También genera intensos problemas ambientales, entre otros: contaminación de aguas y tierras con agrotóxicos, consumo desmesurado de agua o una alta emisión de gases de efecto invernadero atribuibles a su transporte hasta nuestros mercados (las rosas frescas viajan en avión) desde estos países hasta Cataluña.
Nunca un monocultivo de exportación ha sido una solución al hambre, pobreza ni ha mejorado las condiciones de vida de las personas que trabajan en él. Estos monocultivos solamente benefician a una oligarquía local y a las grandes corporaciones productoras y comercializadoras de las rosas del "Sur".
Mientras, muchos productores y productoras de nuestro país tienen grandes dificultades para sobrevivir. Por estos motivos os recomendamos que compréis las flores producidas aquí y que rechacéis las lejanas.
El día 23 de abril, VSF venderá rosas producidas en el Maresme. Nos encontraréis en la Rambla del Carme esquina con la calle estrecha de Vic, de 9 de la mañana a 7 de la tarde.
Cenizas, salmones y rosas.
Los alimentos se acumulan en las despensas debido a la cancelación de los vuelos, como prevención a las cenizas volcanicas que en estos días cubren los cielos europeos.
A todo ello, la industria de horticultura de Kenia está perdiendo 3 millones de dólares al día y necesitará varias semanas para recuperarse, incluso si los vuelos se reanudaran ahora, ha aseverado su asociación de exportadores.
Colruyt, una cadena de supermercados de descuentos de Bélgica, ha declarado que las ventas de ramos de flores, como rosas de Kenia y de pescado fresco de Islandia, están interrumpidas desde el sábado.