Reunión campesina por la agroecología en África

21/07/2011 | VSF Justicia Alimentaria Global

El pasado mes de junio se reunió en Zimbabue un grupo de campesin@s y técnic@s de organizaciones miembros de la Vía Campesina con el fin de planificar cómo promover la agroecología en las regiones de África Austral, Oriental y Central. Este encuentro se ha llevado a cabo partiendo de la creencia de que la agroecología y la reforma agraria son pilares fundamentales para la construcción de la Soberanía Alimentaria.

África, cada vez más, se ve afectada por una serie de amenazas como consecuencia del modelo económico que impera en los países industrializados. La agricultura industrial es una de las expresiones de este modelo económico y es la continuación de la llamada “Revolución Verde” que se impuso con fuerza en Europa en los años 50 y que ha convertido la agricultura en un sector irracional, no solamente en términos energéticos, sino también en términos económicos.


"África, cada vez más, se ve afectada por una serie de amenazas como consecuencia del modelo económico que impera en los países industrializados".


En África, las consecuencias de este modelo de agricultura se hacen notar sobre todo desde 2009, con el acaparamiento masivo de tierras por parte de grandes Corporaciones Transnacionales, algunas de ellas españolas. Como consecuencia del acaparamiento de recursos, las familias campesinas pierden su medio de subsistencia y tienen que migrar del campo a la ciudad donde les espera un futuro probablemente no muy esperanzador.

Además, África, aun siendo el continente con la menor liberación de gases de efecto invernadero por habitante, sufre cada vez más el impacto del cambio climático como consecuencia del modelo consumista de los países industrializados. De modo que la agricultura cada vez es más impredecible para aquellos que no cuentan con sistemas de riego y otras infraestructuras que “disimulan” los efectos del cambio climático.

Por último, la entrada a los países africanos de los productos agrícolas subvencionados procedentes en gran parte por los países de la Unión Europea, destruyen las posibilidades de éxito del producto nacional que, paradójicamente, acaba resultando más caro para el/la consumidor/a final.

El posicionamiento de Vía Campesina ante estas amenazas, es proponer a sus gobiernos la agricultura agroecológica y las políticas de Soberanía Alimentaria como única solución conocida para enfriar el planeta y devolver a los recursos naturales sus características iniciales, en la medida de lo posible.
Además de la restauración de los suelos y las aguas, este modelo alternativo permite que se mantenga la diversidad genética por lo que se reduciría la dependencia de los y las campesinas hacia las grandes corporaciones aumentando así su autonomía.


"África, aun siendo el continente con la menor liberación de gases de efecto invernadero por habitante, sufre cada vez más el impacto del cambio climático como consecuencia del modelo consumista de los países industrializados".


En esta línea, es imprescindible la redirección del curriculum escolar hacia la agroecología; la protección de los mercados domésticos que están ahogados ante la liberalización de los mercados y la creación de programas de apoyo a la agricultura agroecológica realizada por familias campesinas. Por último, es necesario que haya un comportamiento más responsable en las próximas conferencias internacionales en las que se trate el cambio climático como la próxima COP-17 que se celebrará en Sudáfrica. Queremos que se llegue a acuerdos realmente comprometidos con la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, contrariamente a lo que sucedió en la pasada COP-16 en Cancún.

Mientras el movimiento de Vía Campesina sigue ejerciendo presión a sus gobiernos y sigue empoderando el movimiento campesino, no se quedan de brazos cruzados y se compromete en este encuentro a seguir impulsando la agroecología y la Soberanía Alimentaria. Algunas de los compromisos se basan en la formación tanto en las escuelas así como de campesin@ a campesin@, la protección de las semillas locales y la promoción de técnicas que mantengan a largo plazo las características naturales del suelo y las aguas, entre otras iniciativas.

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